Nunca pensé que alguna vez me encontraría bailando en el museo de Cs Naturales pero resultó ser así. Fue una noche de propuestas innovadoras, de la mano de jóvenes artistas de diferentes partes del mundo, bajo una sola consigna. Entremezclar contextos que en apariencia son disímiles para llevar a cabo un evento artístico multimedia con un sentido conceptual integrador que nos permite ver de forma clara cómo todos estamos en constante interrelación.
El separamiento de los diferentes aspectos de la vida de las personas resulta obsoleto cuando vemos cómo pueden integrarse de una manera artística, llamativa y coherente.
El evento ofrece un recorrido especial y sumamente sensorial por el museo, intervenido con visuales, exposiciones fotográficas, performance & música. Complementándose la temática de cada espacio, habitando y suplementando las exposiciones de distintas especies animales y vegetales de diferentes eras del planeta.
Se proyectaron cortometrajes y largometrajes abarcando la temática del hombre, la naturaleza y la tecnología como agentes complementarios que conviven en el planeta tierra. Bajo una mirada artística e inspiradora. El separamiento de las disciplinas, como si nada tuviera que ver arte y ciencia, pertenece sólo a una cuestión del lenguaje. En realidad están profundamente enlazadas, y lo podemos ver delante de nuestros ojos cuando acontecen eventos como este: pasado, presente y futuro convergen en la Fuga Jurásica.
En el patio exteriornos recibió Jotacapsula al lado de los huesos de dos tigres dientes de sable, ofreció un <live set experimental> utilizando una instalación con distintos dispositivos para hacer música, desde un Gameboy & demás juguetes electrónicos hasta un enorme controlador para mezclarlos, ejecutar nuevos sonidos y samplearlos.
En la sala de los mamíferos los artistas se ubican detrás de los huesos de un lobo marino de 4 metros de largo, a la izquierda de los quirópteros embalsamados. La acústica es muy particular, propia sólo a un museo.
Llegamos a esta sala mientras Electromcfly ofrecía un set a puro techno, presentando su trabajo bien llamado “concepto hipnótico”.
Además, allí mismo tuvimos el placer de ver a la artista sonora Mene, quien compone y produce música utilizando su voz, sintetizadores e instrumentos inventados por ella y diversos medios electrónicos en su set en vivo que consiste en una performance sonora y lumínica. Estableciendo climas y atmósferas que conectan con nuestro yo primitivo y sus pulsaciones.
Los artistas invitados a la Fuga Jurásica ofrecen puestas en escena combinando performance, experimentalismo y herramientas audiovisuales, sin dudas un cóctel alucinante.
Todos los jóvenes, adultos y niños asistentes están constantemente rodeados de estímulos provenientes de la sobrecarga visual y sonora que implican tanto cientos de piezas taxidérmicas de aves, roedores, caninos, felinos e insectos, como la música que está sonando. Sonidos sumamente armónicos, o no tanto y que en su disonancia van cautivando nuestra atención.
Realmente es novedosa la propuesta que ofrece este festival. Apto para todo público. Es imposible aburrirse contando con más de 4 sectores repletos de arte en sus más remotas expresiones; desde la taxidermia o embalsamamiento, la paleontología, historia, piezas extravagantes recreando animales y escenas. Hasta una colección de mariposas de todo el mundo en una enorme vitrina proyectada. Contando con el despliegue de escenarios, instalaciones y performance, como <<Misión y Luna>> de Sofía Kauer, formaron parte del festival durante 2 días y dieron lugar a la puesta en escena de más de 50 artistas de diversas disciplinas.
Los artrópodos recreados con cables reciclados cuelgan del techo en el salón de los insectos.
En el sector de los gigantes terrestres figura un elefante asiático, un chimpancé y los especímenes menos evolucionados al homo sapiens.
En medio de ellos una muestra fotográfica se proyecta en las paredes y por encima de los huesos. Parecieran querer darle vida y sentido a los pedazos de ciencia que fueron distribuidos alguna vez allí con frío cálculo.
Reviven aquello que está muerto en un sentido artístico, resignifica las partes de naturaleza deconstruidas y desmitificadas por la ciencia. Lo que fue desprovisto de alma le es devuelto en cierta forma. El museo se reinventa dentro de sus posibilidades, y ofrece integración. Da nuevos sentidos a esa estructura rígida con su particular acústica y olor.
La Fuga Jurásica descontractura el museo. Entre los monstruos de los mares prehistóricos el <<techno>> atraviesa cuerpos, vitrinas y restos óseos.
Contrasta lo antiguo y lo moderno. Lo vivo y lo muerto. El Homo sapiens moderno conecta con su naturaleza y la prehistoria, en un encuentro de arte vanguardista.
Las nuevas piezas del museo somos nosotrxs, humanos, especie vivas en movimiento a través de la tecnología.
La música es acompañada por visuales a cargo de << Vjs>> (visualistas) reconocidos en la escena. Intensificaron la experiencia, guiándola y dándole nueva forma y sentido.
La <<Sala de los dinosaurios>>, <<Mamíferos actuales>> <<Histórica>> hasta el patio exterior ofrecieron un line up cargado de música electrónica experimental llena de vida junto al Electro pop, Ambient, Deep techno hasta Acid con una renovada impronta New wave en Proyectos que exploran diferentes géneros musicales mezclados con nuevos ritmos.
Alexei Belikow, Parallel, Nebelleben, m4U (Chile), Acid Goonies, Cosaquitos en Globo, Kobra kei, El signo, Richter, Hiroshima Dandys, Federico Valsecchi, Cubecatz, Carlos Shaw, Mi cosa de Resistance.
Ellos Fueron algunos de los artistas que pudimos disfrutar en vivo.
La dinámica del evento se desarrollaba con varias presentaciones en simultáneo, así que cada vez que dábamos una vuelta por el museo nos encontrábamos con una performance distinta, casi por sorpresa y en cualquier momento.
La estética del festival resulta un constante juego entre pasado y futuro. Ambos convergen en un presente instantáneo y llega a nosotros a través del museo de Ciencias Naturales, <<Bernardino Rivadavia”>> con sus 200 años de historia.
En esta ocasión como escenario de una muestra del arte vanguardista de un mundo en pleno S. XXI. Sin dudas único en su tipo.
Texto: Sofía Godzic - Fotos por Nicolás Lucociero.